-eras virgen!!!
Kayla se espanta y deja caer la botella en el suelo
quebrandose en pedazos. Esta sorprendida y no porque lo haya descubiero sino
por el veneno que destilaban esa palabras, su voz grave y aterciopelada fue
sustituida por una voz dura, llena de odio, rancor e incredulidad.
-respondeme, eras virgen Kayla?!?
-si “dice kaylas apenas e un susurro”
-si, y asi lo dices no mas!
-que quieres que te diga
-maldita seas por que no me lo dijiste?
-Tu no tines derecho a sabe nada sobre mi
-te equivocas si lo tengo!
Esa fue la frase que acabo con la paciencia de Kayla quien
se creia que era ese Matt C., su padre? El no sabe nada de su vida para
juzgarla; por lo que empiesa a gritarle devuelta.
-no, no lo tienes!
-eres mi protituta personal, tengo que saberlo todo sobre ti
y me lo diras ahora!!
-quien te crees que eres, mi padre!
-no creo que a tus padres le intereses mucho!
-tu no sabes nada, y no tienes derecho hablarme asi de
casualidad sabes mi nombre!
-que tengo que saber, solo hay que verte aqui para deducir
que a tus padres les importas un carajo. Eres una prostituta, una mujer que
vende su cuerpo por dinero.
Le da la espalda esas palabras hieren mucho a Kayla, la lastiman en lo mas profundo de su alma, sabe perfectamente que sus padres no
estarian de lo mas orgullosos; pero ese era su destino y tenia que aceptarlo. Siente
como las lagrimas empiesan a salir de sus ojos recoje sus cosas en silencio y
se dipone a salir cuando siente la mano de el agarrandola por el hombro.
Intenta quitarselo de encima sin darle la cara pero no funciona, por lo que se arma de valor y lo mira directamente a los ojos.
-sueltame
No lo grita, lo dice tranquila y firmemente. Matt se
paraliza al verla llorando y con sus bellos ojos llenos de ira y desconsuelo, momento que
Kayla aprobecha para salir corriendo de la habitacion.
Ya fuera del antro Kayla toma un momento para tomar aliento
y limpiarse las lagrimas de los ojos, empiesa a caminar en direccion a su casa.
Unas cuadras antes de llegar a su departamento ve un Starbucks y decide entrar
a tomarse un “caramel Frappuccino”, al entrar observa el local, tiene buen
ambiente, la cancion que suena de fondo es “finally found you de Akon” y no hay mucha gente. Se dirige a la caja y
cuando le dan su pedido va a sentarse a la mesa mas alejada de todas pero la
tambien la que tiene las mejores vistas a la calle.
Observa a las personas caminar tranquilamente mietras que
otras se dan prisa, “asi es el la vida en la gran manzana” piensa. Le da un
sorvo a su café helado y sin quere empiesa a recordar momentos tristes en su vida,
empiesa a llorar por lo que baja la mirada hacia la mesa para que nadie se de
cuenta. En un momento un muchacho se sienta a su lado y la abraza. Kayla se
exsalta sabe que deberia alejarse de el pero en esos momentos necesita un gran
abrazo.
-por que me abrazas?
-porque no estuve hay para evitar que lloraras
Al escuchar esto pone sus brazos alrededor del chico y
empiesa a llorar en su pecho, despues de un rato Kayla deja de llorar y se
separa del chico para mirarlo a la cara. No es nada del otro mundo pero tiene
su atractivo, con una atractiva sonrisa, con ortodoncia, pero atractiva.
-lo siento “dice Kayla bajando la cabeza”
-ey estas bien? “le dice el chico obligadola a mirarlo a los
ojos”
-si gracias “kayla sonrie”
-como te llamas?
-Kayla y tu?
-Audrey, si se que es nombre de chica pero asi me llamaron y
no pienso cambiarlo
-me gusta
-bromeas?
-no, tus padres fueron muy originales
Ambos sonrien, ordenan mas café y algunos aperitivos. Pasan
la tarde hablando, sonriendo y confesando una que otras cosas personales y sin sentido. Ambos
descubren que tienen mucho en comun pero tambien muchas diferencias, se dan sus numeros
y sus correos electronicos. Unos Segundos antes de que se separen Audrey pregunta
-te gusta la comida italiana?
Ambos sonrien, se miran a los ojos; los cuales respondieron
la pregunta y unen sus labios en un dulce beso.
Ese seria el principio de una bella historia…